¿Cuántas gotas se necesitan para horadar una piedra, así caliza fuera?¿Cuánta constancia en ese caer pequeño pero continuo para vulnerarlas, romperlas o transformarlas? Así se hizo la arena que escapa de tus manos. Comparte esto:Haz clic para compartir en Twitter (Se abre en una ventana nueva)Haz clic para compartir en Facebook (Se abre en una ventana nueva) EN PROCESO DE MEJORA NO LIVE NO GAME